EL TOQUE HITCHCOCK EN MADRID

¿Quién no conoce, aunque sea solo de oídas, a Alfred Hitchcock?

Hablar de Hitchcock es hablar de cine de suspense con todas sus letras, este director inglés fue un pionero en el thriller psicológico. Aunque no lo creáis, Alfred Hitchcock rodó sus primeras películas en Inglaterra y la mayoría de ellas eran mudas, no sería hasta 1939 cuando se marcha a Hollywood y arranca su carrera como cineasta y productor de películas sonoras.

Desde muy temprano, Hitchcock fue muy consciente de su deseo de primar una manera particular de hacer películas, en las que lo visual y las respuestas emocionales del público eran fundamentales. Partía de un lenguaje común aceptado en sus comienzos, el del cine mudo anterior a 1927, sobre todo el expresionista alemán, que sin embargo fue olvidándose según las películas habladas se desarrollaban. A lo largo de toda su carrera él se mostrará fiel, con matices diferentes, a esa manera de hacer, lo que marcó su singularidad respecto a su propia época. el éxito comercial de la mayoría de sus propuestas le permitió esa diferencia y una libertad creativa de la que no disponía la mayor parte de sus colegas que trabajaban para las grandes productoras.

Incluso en su etapa norteamericana, Hitchcock siempre planteó una manera particular de contar las historias, de una forma sobre todo visual, en la que los recursos escogidos eran atípicos y muy personales. En la segunda versión de "El hombre que sabía demasiado" (1956) hizo avanzar la cámara en planos sucesivos, mientras sonaba la canción de Doris Day, como si fuese la propia música la que se movía por el espacio hasta llegar al niño secuestrado.

En sus comienzos profesionales Hitchcock constituyó una sociedad que tenía como única tarea el dar a conocer a la prensa las noticias referentes a sí mismo. Una pista que muestra que cuidaba la promoción hasta el detalle más nimio. Producida por él mismo, "Psicosis" (1960) fue su obra maestra de la publicidad, con recursos raros hasta entonces como la insistencia en su propia figura como icono o el establecimiento de sesiones con horario fijo y no continuo.

La relación entre los sexos es uno de los temas clave en la obra del cineasta, y el deseo uno de los motores centrales de sus películas, muchas veces manifestado a través del voyeurismo - con su película manifiesto "La Venta Indiscreta" (1954). El deseo también es mostrado a través de las relaciones sentimentales complicadas, con "Vértigo" (1958) como máxima expresión de ello, con un protagonista incapaz de amar a la mujer real y enamorado de la sublime.
Otras veces los protagonistas simplemente han de afrontar la imposibilidad de amar, como "Marnie, la ladrona". También hay con frecuencia relaciones filiales, un deseo posesivo del hijo hacia la madre "Psicosis" (1960), o lo contrario, "Los pájaros" (1963). Todo ello comportó la creación de imágenes repletas de erotismo u otras cargadas de tensión.

Hitchcock siempre fue muy consciente de su época y del contexto artístico y cultural que esta ofrecía. Su estancia en Berlín le otorgó un contacto temprano con los recursos no solo del cine expresionista

sino de elementos usados por las vanguardias plásticas. No tardó sin embargo en manifestar la conveniencia de insertar sus películas en ambientes contemporáneos y reconocibles. Fue en la década de 1950 cuando incluyó de manera decidida en sus obras los signos generales de la modernidad plástica y arquitectónica. La lista de creadores con los que trabajó, o en los que se inspiró, es enorme: Len Lye, Julio Le Parc, Picasso, Dalí, Los Hermanos Whitney, modistos como Balenciaga, Christian Dior... El triunfo de la modernidad entre la clase media norteamericana se plasmó en sus películas en technicolor, que con frecuencia parecían inspiradas por las páginas de las revistas femeninas de la época.

A lo largo de su etapa británica Alfred Hitchcock usó los espacios arquitectónicos sobre todo de una manera escenográfica, haciendo de ellos lugares tenebrosos. A partir de "La Sombra de una duda" (1943) lo cotidiano empezó a cobrar un peso fundamental, y son otras posteriores como "Con la Muerte en los Talones" (1959), con alusiones diáfanas a los arquitectos Mies Van der Rohe, Le Corbusier o el diseñador industrial Henry Dreyfuss, las que reflejan el triunfo del Estilo Internacional y cómo el director se apropió de él para sus maquinaciones. Las postales de la RDA fueron solicitadas expresamente por el director para inspirar los espacios de "Cortina Ragada" (1966), materializados a partir de esas imágenes.

Muchas de sus películas, desde las primeras, tienen como protagonistas a personajes relacionados con la creación artística. En "La Ventana Indiscreta" (1954), que representa un microcosmos neoyorquino, sus dos personajes principales eran un fotógrafo profesional y la editora de una revista de moda, y tras las ventanas de los apartamentos vecinos existían todo tipo de artistas. Por otro lado, la habitual influencia de estímulos visuales de todo tipo, tanto de la cultura de élite como de la popular, era evidente en la película.

Otro de los factores por el que Hitchcock es y siempre será reconocido en el ámbito cinematográfico es por su sentido de la técnica a la hora de lograr la secuencia que tenía en mente. Por ejemplo, en la película "Los Pájaros" (1963) utiliza la superposición de capas, combinando distintos planos de aves rodados previamente consiguiendo un efecto de acumulación muy inquietante. Sería algo similar a esto:

Al comienzo de su carrera, Hitchcock se sirvió del efecto Schüftan, que insertaba a los actores en un espacio donde solo era real una pequeña parte del decorado y el resto, la parte más espectacular, se evocaba a través de una pintura o una fotografía reflejada en un espejo. 

El director utilizó este recurso en la secuencia del Museo Británico de "Chantaje" (1929). Primero fotografió la fachada y el interior del museo y más tarde utilizó estas imágenes para rodar la acción en el estudio. colocando entre el actor y la cámara un espejo con el reflejo de las fotografías del museo, la toma lograba el realismo de una localización real. Dicho espejo se raspaba de tal modo que el actor que estaba detrás - rodeado por un pequeño decorado- quedase visible. de esta manera, la fotografía fija y la acción del actor quedaban integradas, logrando en el plató y sin necesidad de grandes decorados la verosimilitud de un espacio real.

La secuencia más famosa de toda la obra de Hitchcock es el asesinato en la ducha de su film "Psicósis". Planteada como un ejercicio de construcción visual, el director la concibió sin música, con la participación expresiva de sonidos de varios tipos. Solo más tarde, durante la fase de postproducción, Bernard Herrmann le sugirió añadir una pieza musical. Una vez comparados los resultados, Hitchcock se decantó por la opción del compositor: una insólita pieza carente de melodía y compuesta solo por sonidos agudos de violines.

En su lucha contra la censura, Hitchcock logró varios hitos con "Psicosis": mostrar un pecho desnudo, si bien desenfocado; encargar un cartel que enseñaba por vez primera a una estrella en sujetador; comenzar la película con una larga escena de besos de dos figuras semidesnudas; y, lo más ofensivo para los censores, enseñar en dos secuencias un retrete - una novedad en el cine de Hollywood-, incluido el sonido de la descarga de la cisterna.

STORYBOARD DE "PSICOSIS"

 
 

ALGUNOS DOCUMENTOS DE RODAJE

Cómo Hitchcock medía las intensidades dramáticas y de suspense 

 

Planta de cámara                         Diseño de Vestuario                     Diseño de Maquillaje y Peluquería




      

Diseño de decorados // Diseño de producción.





PODÉIS VER LA EXPOSICIÓN COMPLETA (que os recomendamos encarecidamente) EN LA FUNDACIÓN DE TELEFÓNICA (en Madrid)

Share on Google Plus

About PRODUCCIONES PANACEA

This is a short description in the author block about the author. You edit it by entering text in the "Biographical Info" field in the user admin panel.